Pensando en el día lluvioso en el que estoy inmersa, me pregunto ...
¿Cómo es que no termino de concentrarme y
logro escribir con facilidad un texto literario que llene mi alma de
alegría por haber expresado todo lo que siento de manera natural y
espontánea?
¿Será que ya me abandonó mi duende
inspirador?
¿Dónde estarás que no escucho tus suaves
palabras en mi oído ?
Estarás seguramente brincando en otros
hombros para soplarle los versos de un poema.
O sobre la mesa de luz de una muchacha para
robarle los besos en sus sueños.
De todos modos yo te espero , mi duende
pícaro ,embustero.
Legarás nuevamente en el momento en que
esté distraída ,
y de un salto habitarás mi alma como siempre lo has hecho.
micam