A la hora en que el silencio ardiente de la siesta
se adueña de las calles e invade las alcobas ,
los cuerpos reposan y la mente se sosiega.
En los jardines se aviva un mundo asombroso.
Entre verdes y tupidas matas despiertan
los embrujos en una explosión de mil colores
que llena el espacio de aromas y dulzores .
La naturaleza realiza su labor , vive y palpita con amor
bañada de lluvia, abrigada de sol , vestida de flores ,
a veces en silencio , otras en sonido estremecedor…(…)
Micam